Columnas

CENA DE NEGROS

A echarle fregazos

Marco Antonio Vázquez Villanueva

De corta memoria, la oposición en Tamaulipas olvidó que cuando ellos gobernaban no solo hubo ejecuciones o intentos de asesinatos como lo ocurrido el miércoles en Ciudad Victoria cuando recibió un par de balazos Edgar Dannes Rojas, presidente del Tribunal Electoral de Tamaulipas y similar número de impactos recibió en otro acto Eduardo Alvarado, un exalcalde de Padilla, y los divulgan por todas las vías diciéndole a México y el mundo que estamos peor que cuando ellos tenían el poder lo que resulta falso.

Los cabecistas y sus adoradores del PRIAN creen que ya olvidamos las muertes de periodistas o el negro día cuando la delincuencia organizada entró a tres colonias de Reynosa tirando balazos a todo aquel que anduviera en la calle provocando, se dijo, por lo menos 15 muertes de inocentes, como tampoco se ha ido de la memoria el asesinato de familias completas tanto en el sexenio anterior como en el de Egidio Torre.

Pero junto con ellos se equivocan quienes piensan que nos hace daño discutir en la agenda pública la violencia y no me refiero a replicar o multiplicar mensajes sin ton ni son, no, me refiero a que han llegado los días que entre todos podamos ir buscando la estrategia adecuada para frenar la delincuencia en lo que a nosotros nos toca, quizá comenzar con nuestros hijos y familias a orientarlos, educarlos, enseñarlos a respetar porque hasta parece que vamos en sentido contrario a ello, los chicos de hoy ni siquiera responden un buenos días, menos son capaces de hacer algo por sus semejantes si no les reditúa, es más, no obedecen ni respetan casi a nada y a veces a nadie.

Por supuesto, en el tema de la violencia, es una mala señal que en una conferencia conjunta entre el Fiscal y el Secretario de Seguridad Pública haya regresado aquella socorrida frase de los sexenios anteriores, eso de “hechos aislados”, es claro que en su lógica y explicado con peras y manzanas tiene sustento lo que mencionan y hasta parece la realidad, sin embargo, vale más hablar las cosas por su nombre, sin adjetivos si quieren, pero si alejarse del pasado en todo lo posible, hasta en el discurso.

Vaya pues, no hace daño reconocer que hubo hechos de violencia, el mismo gobernador Américo Villarreal en sus discursos públicos habla que se sufren, que no habrá de ocultarse la realidad, por eso lo aceptable es que expliquen lo ocurrido, pero no que los adjetiven como “hechos aislados” porque la frasecita la recordamos con dolor y genera desconfianza porque luego dará la impresión de que seguiremos igual que antes y créalo, no es así, se avanza porque hasta hoy, en todo lo que va de esta administración, a cada acto violento le ha seguido una respuesta contundente.

Hay algo más que deben tomar en cuenta los encargados de la seguridad pública, se batalla mucho para ganarse la confianza del pueblo, este gobierno lo sabe porque batallo para ganarla, no es una opinión, son datos, las encuestas de empresas privadas y públicas colocan a Américo Villarreal Anaya con un respaldo popular cercano al 70 por ciento, es el mejor evaluado y el de mayor confianza de todos los mandatarios estatales del país y no solo es percepción, se refleja, por ejemplo, con datos del IMSS se puede mencionar que la inversión pública y privada no ha parado y se generan más empleos que en administraciones anteriores, a ello agregue que en este periodo vacacional más de dos millones de personas transitaron por nuestras carreteras, también que la percepción de violencia ha bajado hasta en las ciudades de la frontera que antes se acercaron al 90y el 100 por ciento de personas que tenían miedo andar en la calle, por eso le insisto, hay que hablar de la violencia sin adjetivos, siempre en su justa dimensión.

Existe una ventaja más de exponer la situación en lo público, invariablemente la respuesta de la federación ha llegado en nuestros momentos complicados que se han tenido en este sexenio, a veces con más presupuesto y analizando estrategias, invariablemente con más elementos que vigilen las calles.

Por supuesto, tener libertad de poner en la agenda la violencia implica observar con cuidado el origen de la información para no distribuir falsedades o excesos, me explico, en los últimos días los allegados al cabecismo han intentado por todos los medios hacernos creer que Tamaulipas se incendia, se atreven a generalizar la violencia, los actos ocurridos los maximizan, los exageran, hasta pretender persuadir a la gente que no deben salir, que hay un toque de quedao o que en cualquier momento pueden seguir atentando contra políticos, la realidad no es así, le reitero, no está mal hablar de lo que pasa, pero tampoco podemos caer en las ansias destructoras de los opositores a los que no les importa llevarse entre las patas al pueblo, mire, sembrar terror o intentar cambiar la percepción de seguridad o de confianza hacia el actual gobierno y hacia Tamaulipas al final nos afectará a los del pueblo porque las empresas pueden optar por no invertir, por no generar empleos, en este momento el error sería doble ya que hasta los empresarios, los ejecutivos de cadenas nacionales, han reconocido que este sexenio si hay trabajo, se les escucha, que se siente en mejores condiciones para todos.

¿Qué se debe hacer?, pues ser muy responsables, hablar sin adjetivos y si vamos a exponer la violencia que nada más sea con dos intereses; el primero que lleguen más apoyos de la federación de ser necesarios y; seguido de ello, para que nos pongamos las pilas y actuemos donde podemos hacerlo, nosotros en casa, las autoridades en lo público, nosotros exigiendo resultados, pero haciéndonos responsables de los nuestros, ellos, los encargados de la seguridad, actuando en beneficio del pueblo en general para que no vuelvan a ocurrir problemas.

Para concluir, también otra certeza, no son tiempos de apanicarse y quedarse en casa, al contrario, son tiempos de tomar las calles, ocupar los espacios porque todo vacío se llena por los otros, sobre todo, hay que actuar como decía un viejo político el día que quisieron joderlo y dejarlo fuera de todo; “estos cabrones creer que me van a apanicar, no entienden que si algo se hacer es echarle chingazos, nada nos regalan en esta vida y nada me han regalado como para dejárselos sin pelearlo”, así nosotros, hay que actuar, trabajar con el gobierno apoyando lo bueno, proponiendo cuando se vean dudas, señalando los errores porque esa es la certeza, nada nos han regalado, nada es gratis, y no podemos retroceder en lo ganado, nos toca echarle fregazos…

LLENAN ALUMNOS DE LA UAT “UNA MOCHILA DE OPORTUNIDADES”… Como parte de la campaña “Una mochila llena de oportunidades”, organizada por la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), se llevó a cabo una jornada de empaquetado de útiles escolares en el Centro Universitario Sur (Campus Tampico) de esta casa de estudios.

El evento reunió la entusiasta colaboración de integrantes del Club de la Edad de Oro del Gimnasio Multidisciplinario de Tampico, que participaron en esta actividad junto al rector, MVZ Dámaso Anaya Alvarado, y su esposa, Lic. Isolda Rendón de Anaya, presidenta de Familia UAT.

Durante la apertura, el rector destacó el compromiso de promover acciones enfocadas en el humanismo y la responsabilidad social, resaltando la importancia de contribuir como una gran familia universitaria en apoyo a quienes más lo necesitan.

Expresó su agradecimiento a todos los involucrados en la jornada de empaquetado de útiles escolares, reconociendo la labor conjunta de estudiantes, personal académico y voluntarios, entre ellos, los adultos mayores que jugaron un papel esencial en el empaquetado de los materiales.

En este marco, el MVZ Dámaso Anaya y la Lic. Isolda Rendón otorgaron reconocimientos a los fundadores del Club de la Edad de Oro del Gimnasio Multidisciplinario de Tampico, por su valiosa contribución y su constante apoyo a las iniciativas universitarias.

La campaña “Una mochila llena de oportunidades”, desarrollada del 10 de junio al 23 de agosto, tiene como objetivo recolectar donativos de útiles escolares entre la comunidad universitaria y la sociedad en general, para distribuirlos a estudiantes de escuelas de las zonas rurales y apoyar su desarrollo educativo.

En lo que corresponde a la zona sur, se realizó la primera entrega de útiles, que consistió en 50 mochilas para estudiantes de la Escuela Primaria Fraternidad, en el ejido Maclovio Herrera del municipio de Altamira.

Esta acción destaca el compromiso de la UAT con la educación y marca el inicio de una serie de entregas programadas para seguir apoyando a más estudiantes en diversas localidades.

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