EN VISTO

Proyectos políticos que se desinflaron
Por Dora de la Cruz
En política nada está escrito; todo cambia de un momento a otro, así es que nada se puede dar por hecho cuando algo está lejos de decisiones, pero además, en este camino, en el que ya se adelantaron algunas políticas y políticos, hay a quienes ya se les
cayó su proyecto y seguramente solo permanecerán quienes son coherentes con la ideología de Morena, rumbo a la elección 2027 y la del 2028.
El Movimiento está cambiando las reglas y con ello, se están autodescartando quienes se adelantaron, creyendo que seguían las mismas prácticas políticas que hacían en aquel entonces los partidos en el poder: adelantaban las campañas y se placeaban quienes aspiraban a candidaturas a cargos de la elección siguiente.
El que se mueve no sale en la foto, frase del priismo, que se refería a quienes aspiraban y se adelantaban a mostrar ambiciones, quedaban fuera, hablando de un control político,
no de reglas democráticas.
Pero eso ya cambió; en el proyecto de transformación que encabeza Morena, se cambió las reglas: se exigen perfiles con trayectoria, compromiso con las causas del pueblo y una conducta pública coherente.
Algunas y algunos, formados en la vieja escuela, ya no encajan, porque ahora no se trata de quedarse quieto para salir en la foto, sino de moverse con congruencia, para ser parte real del cambio y permanecer en las propuestas electorales.
En este camino, en Tamaulipas, quienes se adelantaron están quedando fuera. No les alcanzará para llegar, entre el golpeteo político de la oposición y la grilla interna de Morena, que ya les ha pegado, incluyendo a los aspirantes más discretos, que solo se mueven en círculos petit, quienes también están cometiendo errores que los dejarán como el chinito: “nomás milando”.
Háganos un recuento de lo que ha pasado luego de que Morena ganó la gubernatura en Tamaulipas con el liderazgo del doctor Américo Villarreal Anaya; a tres años de qué el estado dio un giro en las urnas, también lo fue para la clase política: se sumaron de otros partidos ya con la marca de Morena, dando por seguro que ser funcionario y tener un cargo aseguraba una candidatura, pero no ha sido así; les debe quedar claro que no ganaron ellos, fue la marca guinda que hoy está consolidada como primera fuerza política en todo el país
Después de la victoria electoral de Morena, con Américo Villarreal en la gubernatura que marcó el fin del cabecismo; muchos se alborotaron, sin entender que Morena tiene formas de operación distintas, en las que incluye encuestas, procesos internos, requisitos éticos y de trayectoria.
Pero además, la regla de la paridad de género (y algunos ya dan por confirmado que a Tamaulipas la candidatura a la gubernatura le corresponde a una mujer), llevó a que varias políticas con presencia pública y reconocimiento ciudadano iniciaran de forma anticipada a moverse por todo el estado y reuniéndose con grupos de la sociedad civil, como el caso de la alcaldesa de Nuevo Laredo, Carmenlilia Cantúrosas, y aunque lograron posicionarse en sus entornos, también fueron señaladas por prácticas que, en Morena, ya no se perdonan; entonces el el escenario político ha cambiado, cuando aún falta un largo trecho por recorrer.
Mientras tanto, otros políticos morenistas, convencidos de que al final el candidato será hombre, intentan armar estructuras internas, formar grupos y empujar sus aspiraciones desde las sombras. Pero ese juego también Morena no lo perdona. La reciente reforma del partido, que prohíbe el nepotismo y busca cerrarle el paso a viejas prácticas, junto con la anunciada reforma electoral de la presidenta Claudia Sheinbaum, cambiará por completo el contexto político y en ese nuevo escenario surgirán nuevos nombres que hoy no figuran.
Tranquilos, morenos y morenas. Ser leales a su partido es la primera regla.
Lo que venga será para quienes sepan esperar, trabajar y no traicionar.