EN VISTO
Los panistas ya no se ponen el chaleco
Dora de la Cruz
Los funcionarios del pasado sexenio de cabeza de Vaca, llegaron de Reynosa y del estado de Texas, muchos de ellos con doble nacionalidad como se acostumbre en las ciudades fronterizas por la cercanía con el vecino país, lo que generalmente se acostumbra en la población que vive en la frontera de Tamaulipas, sobre todo, en la clase empresarial y políticos, que disfrutan de anonimato en esta ciudad.
Fue muy notorio el desapego de todo el gabinete azul, por el estado de Tamaulipas, vinieron a hacer negocio y se gastaban los pesos en los malls de Texas, acá en la capital vivían de lunes a viernes y corrían rápido el viernes a la frontera para pasar
El fin de semana, así fue todo el sexenio.
El dinero nunca circuló en la capital del estado, no compraban ni un clavo, menos alimentos, hasta tenían vetados algunos restaurantes que pertenecían a algunos empresarios priistas, porque los detestaban en aquel entonces y hoy son los grandes aliados, ni vergüenza les da andar con los mismos que de corruptos no los bajaron, fue lo menos que dijeron de ellos y ellas.
Hay que dejar en quiebra a Ciudad Victoria, se dijo, fue la encomienda que tenían todo el gabinete, todo lo compraban en Monterrey, empresas de otros estados fueron los proveedores, y hasta la lavandería de hospitales y copias de las oficinas de la Secretaría de Educación, venían de un negocio de Monterrey, así es que si no alcanzaban las copias de los cheques tenían que mandar traerlos desde la ciudad regia.
Y sí, casi acabaron con la capital del estado, el desempleo llegó al tope, negocios quebrados, hubo hasta migración, ante la desoladora economía que se enfrentó en ese gobierno que ahora con los actos de corrupción que han sido denunciados, se conoce la raíz del problema al que logró sobrevivir Victoria, resistió los embates de los cabecistas, que sólo venían aquí hacer negocios.
Alguien comentó alguna vez; este gobierno, es del gobernador Cabeza de Vaca, su familia y sus cuates y párele de contar, y así fue, nadie recuerda que obra se hizo en este sexenio, ni que programa social es emblema que nos recuerde que, por Tamaulipas, paso el Gobierno del Partido Acción Nacional.
Todo este asunto de los ex funcionarios que vivían en los McAllen, viene a confirmarlo, ayer, cuando se hizo viral la venta de un chaleco, de esos tipo Burberry, en una pulga de Brownsville, vaya de segunda mano, la cual perteneció a uno de esos ex titulares de primer nivel del anterior sexenio azul y el que tiene impreso el sello cabecitas a un costado, cuyo propietario del chaleco obviamente allá reside. Ni cómo negarlo, el dinero de Tamaulipas, allá se lo siguen gastando y el chaleco es un testigo más.
Por cierto, nadie ha querido comprar la prenda, ni para esta temporada de Halloween, se atrevió alguna persona adquirirla, ahí sigue en venta, tal vez salga, para el Black Friday, del próximo viernes, en el que se realizará en Texas, el evento de las grandes ofertas en el comercio. Este outfit ya nadie lo quiere, ni los mismos que lo usaron durante seis años.