EN VISTO
Ningún agresor al poder judicial
Por Dora de la Cruz
Con la elección judicial, también vienen temas importantes que no deben subestimarse. Para la designación de las y los candidatos a jueces y magistrados, es fundamental blindar el proceso para evitar que lleguen a estos puestos personas con cultura misógina, de las cuales hay muchas en los juzgados. Esto ha generado un sesgo en la impartición de justicia, especialmente en los delitos relacionados con violencia de género.
La Ley 3 de 3, que impide a agresores sexuales, deudores alimentarios o culpables de violencia de género competir por cargos de elección popular o participar en el servicio público, es una herramienta clave para evitar que agresores y personas con actitudes machistas se conviertan en juzgadores. Este mecanismo debe ser un filtro fundamental en el sistema de justicia.
Existen múltiples casos documentados en los juzgados donde los propios jueces y representantes de la justicia han “justificado” la violencia de género en las salas del poder judicial. En ocasiones, llegan a cuestionar a las víctimas con frases como: “¿Qué hiciste para que tu pareja te golpeara?”. Incluso en temas de pensión alimenticia, un delito que ocupa uno de los primeros lugares en incidencia, persiste una deuda en la aplicación de justicia. Con frecuencia se observa complicidad para que las y los hijos no reciban el ingreso económico que les corresponde.
Por ello, es crucial que no llegue ningún agresor al poder judicial. La aplicación de la Ley 3 de 3 debe ser prioritaria, permitiendo limpiar al poder judicial de juzgadores que justifican la violencia de género amparados en la ley. El compromiso no solo radica en la elección de magistrados y jueces, sino también en que este proceso sea parte de un cambio hacia una política de cero tolerancia contra la violencia hacia mujeres y niñas.
Tamaulipas: Movimiento estratégico en el gabinete estatal
La agenda de Tamaulipas no deja espacio para el descanso. Ayer, el gobernador Américo Villarreal Anaya asistió al informe de la presidenta Claudia Sheinbaum en el zócalo de la Ciudad de México, con motivo de los primeros 100 días de su administración, reafirmando el compromiso del estado con los principios de la Cuarta Transformación. La cercanía entre los gobiernos estatal y federal ha fortalecido la capacidad para implementar políticas que beneficien directamente a las y los tamaulipecos. Durante este periodo, ambos gobiernos han consolidado proyectos clave que apuntalan el desarrollo del estado.
En otro orden de ideas, ayer también se oficializaron cambios relevantes en el gabinete estatal. Adriana Lozano dejó la Secretaría de Finanzas, mientras que Diana Luz Gutiérrez González dejó el Instituto de la Mujer de Tamaulipas. En tanto, Carolina Iveth Martínez Molano fue designada subsecretaria del Empleo y Previsión Social en la Secretaría del Trabajo; Federico Gabriel Navarro de la Piedra asumió como director del Zoológico de Tamatán, y Abelardo Flores Mendoza, quien se desempeñaba como subsecretario del Trabajo, fue nombrado delegado de la Secretaría de Economía en la zona sur del estado.
En cuanto a las posiciones clave, el Dr. Jesús Lavín Verástegui asumió como nuevo titular de la Secretaría de Finanzas, proveniente de la Secretaría de Administración. En esta última dependencia fue nombrada Luisa Eugenia Manautou Galván como nueva titular. Por su parte, Marcia Benavides Villafranca fue designada como directora del Instituto de la Mujer de Tamaulipas. Esta sacudida en el gabinete responde a la política de evaluación constante que el gobernador Américo Villarreal Anaya, ha venido repetido en varias ocasiones a las y los integrantes del gabinete; es decir, hay que dar resultados al pueblo de Tamaulipas.
