EN TÉRMINOS COLOQUIALES
Un robo a la vista de todos
Por Alan Morales
Los concesionarios del transporte público de Victoria y la zona conurbada han decidido, sin previo aviso y sin el consentimiento de las autoridades aplicar un aumento en la tarifa.
Esta medida ha dejado a los usuarios atrapados y sin opciones, obligados a pagar un incremento injusto mientras las autoridades responsables pareciera que fingen demencia.
El subsecretario de Transporte, José Armando Lara Valdés, ha declarado con firmeza que este aumento es “ilegal”. Sin embargo, su advertencia parece no tener peso frente a la audacia de los operadores que siguen exigiendo el nuevo precio a los usuarios sin ningún temor a represalias.
¿Cómo es posible que los choferes actúen con tal impunidad? Lara Valdés ha instado a la población a no pagar esta tarifa inflada, dejando claro que no existe ningún incremento oficial autorizado.
A pesar de que se ha establecido una mesa de negociación para discutir una posible nueva tarifa, los choferes ya han tomado la iniciativa por su cuenta.
Los usuarios han alzado la voz, denunciando que los choferes no poseen ningún documento oficial que les permita aplicar este aumento.
La comunidad no se opone a un ajuste en la tarifa, siempre y cuando esté acompañado por un compromiso claro de modernizar y mejorar las unidades de transporte, que en muchos casos están obsoletas y en mal estado.
Pero en medio de todo esto la pregunta es: ¿quién dio luz verde a este abuso descarado? ¿cuál es el verdadero propósito detrás de esta maniobra? ¿Acostumbrar a los usuarios a pagar más sin ninguna justificación?, ¿no? bueno perdón, pero eso es lo que parece.
Mientras tanto, los ciudadanos de Victoria y la zona sur continúan siendo víctimas de un cobro totalmente ilegal, que no ha recibido el visto bueno del gobierno del Estado. ¿Cuánto tiempo más van a permitir este atropello?
¡Esto es un robo a plena luz del dia!
alarmozu36@gmail.com